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La cooperativa Transporte Insular La Palma, asociada a ASESCAN negocia una deuda millonaria

La Cooperativa Transportes Insular de La Palma, que tiene la concesión del servicio de transportes regular de viajeros en la Isla desde hace más de treinta años, se encuentra en negociaciones con el Cabildo palmero para cobrar una deuda millonaria en concepto de subvención que arrastran desde el año 2009 y de cuyo pago depende, en gran parte, la supervivencia de esta asociación, con una plantilla de 140 trabajadores.

Aunque el gerente de la entidad, Juan Cristóbal Hernández, expresó su deseo de que “podamos llegar a un acuerdo con el Cabildo de La Palma y que se pague el importante déficit que tenemos”, no descartó, como última alternativa, recurrir a la vía judicial para lograr el objetivo y lograr la supervivencia de la empresa.

La discusión, reconoció, se centra en la cuantía de ese déficit, que la cooperativa palmera de transportes acredita en base a las conclusiones de una auditoría interna. Hernández ha invitado al Cabildo a contratar los servicios de una empresa externa para verificar las cantidades, derivadas de los más de 4,6 kilómetros de más que la entidad habría realizado entre los años 2009 y 2012.

Así, Hernández detalló que “la discusión está en la imputación de los gastos, porque ellos creen que los gastos son inferiores y nosotros hemos auditado esa cantidad, que nosotros queremos que contrasten con una empresa o con sus propios técnicos”, señaló el gerente.

Reestructuración
Las dificultades se suman para esta entidad, que tras la supresión de más 50 frecuencias diarias, además de la línea regular que hasta ayer conectaba a diario la comarca del Valle de Aridane con el aeropuerto, no sabe cuánto tiempo podrá mantener la plantilla actual.

Tanto es así, que el gerente de Transportes Insular estimó que “en uno o dos meses tendremos que tomar decisiones, aplicar medidas que no sabemos si pasarían por reducir algunos contratos a media jornada, porque tenemos claro que hay que intentar defender y mantener todos los puestos de trabajo”.

La reestructuración de las rutas de las guaguas llegó la pasada semana tras una larga negociación entre la Consejería de Transportes del Cabildo y la cooperativa, que ha venido demandando mayor transparencia a la hora de negociar cuántos kilómetros se subvencionan en el caso de otras islas y con qué criterios.

La plantilla de la cooperativa pasa por el momento más difícil de su historia dado que aún no han amortizado las inversiones que permitieron la renovación de su flota de guaguas.

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